Gestión de proyecto ágil mediante modelo híbrido de construcción
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Date
2022-05Subject/s
Abstract
A pesar de los avances tecnológicos alcanzados en la construcción, todavía gestionamos los proyectos de un modo tradicional, como de ciclo de vida predictivo. Al considerar que disponemos de las especificaciones técnicas y requisitos detallados desde el inicio, se clasifica el grado de incertidumbre como bajo y los procesos a seguir como conocidos. Por estar definidas las técnicas y materiales constructivos deberíamos establecer una estructura de costes y cronograma fiable. De modo que riesgos y costos estarían bajo control, pero la realidad es otra. A diario la práctica nos lleva a continuos deslizamientos por retrasos de cronograma, sobrecoste y calidad. ¿Por qué? Si se presume que el proyecto es predictivo, claramente definible y controlable. Si conocemos la técnica constructiva y los requisitos establecidos. Si tenemos acotado el alcance, la calidad, el coste y el cronograma del “qué y cómo se hará”. La respuesta es porque necesitamos gestionar el proyecto como de ciclo de vida híbrido entre predictivo y ágil. Necesitamos procesos estandarizados como los seguidos hasta la fecha, pero también necesitamos adaptaciones continuas mediante el involucramiento de los equipos de desarrollo. La gestión tradicional no es suficiente para armonizar la compleja red de clientes, profesionales, proveedores, materiales, herramientas y detalles constructivos. La agilidad nos ayuda con marcos de trabajo colaborativo y herramientas digitales, modelando un proyecto con la información del saber entre todos, ayudados por la inteligencia colectiva para que, mediante diferentes sesiones de trabajo, diseñemos, definamos y proyectemos planos con memorias construibles. La gestión de proyecto ágil mediante Modelo Híbrido de Construcción consiste en aplicar marcos de trabajo ágiles en nuestros proyectos de construcción tradicionales como Scrumban. Empleamos disciplinas ágiles para las actividades con riesgo de deslizamiento, incertidumbre o complejidad y enfoque predictivo de procesos, para las actividades definidas o de flujo de trabajo previsible. Gestionamos la adaptación al cambio mediante Sprints de trabajo colaborativo, para monitorear la planificación, la revisión del producto entregable y retrospectiva de procesos seguidos. Trabajamos el desarrollo del proyecto, con los equipos directivos y productivos gracias a la comunicación y transparencia de los Sprint semanales. El factor humano todo lo condiciona, “personas por encima de procesos”. La complejidad está en la concatenación de actividades que se descomponen en tareas donde unos afectan a los otros por efecto dominó, llegando a ser más difícil la integración entre gremios y actividades que la propia ejecución de las tareas. Cuando se diseña podemos definir y conocer el “qué se hará” pero no exactamente el “cómo, cuándo ni con quién” porque necesitamos un Plan Maestro concreto y consensuado, que comprometa e involucre a todos los intervinientes. Con Scrum y Kanban, facilitamos el éxito del proyecto, reducimos riesgos, costos, aseguramos el alcance, plazo y calidad. La verdadera ingeniería de valor requiere de equipos multidisciplinares que mediante la diversidad de sus conocimientos y experiencias faciliten la entrega de valor, trabajando continuamente el refinado del producto y de los procesos productivos; eso es Kaizen, la mejora continua que facilita la Economía de Proyecto de valor financiero y social.
A pesar de los avances tecnológicos alcanzados en la construcción, todavía gestionamos los proyectos de un modo tradicional, como de ciclo de vida predictivo. Al considerar que disponemos de las especificaciones técnicas y requisitos detallados desde el inicio, se clasifica el grado de incertidumbre como bajo y los procesos a seguir como conocidos. Por estar definidas las técnicas y materiales constructivos deberíamos establecer una estructura de costes y cronograma fiable. De modo que riesgos y costos estarían bajo control, pero la realidad es otra. A diario la práctica nos lleva a continuos deslizamientos por retrasos de cronograma, sobrecoste y calidad. ¿Por qué? Si se presume que el proyecto es predictivo, claramente definible y controlable. Si conocemos la técnica constructiva y los requisitos establecidos. Si tenemos acotado el alcance, la calidad, el coste y el cronograma del “qué y cómo se hará”. La respuesta es porque necesitamos gestionar el proyecto como de ciclo de vida híbrido entre predictivo y ágil. Necesitamos procesos estandarizados como los seguidos hasta la fecha, pero también necesitamos adaptaciones continuas mediante el involucramiento de los equipos de desarrollo. La gestión tradicional no es suficiente para armonizar la compleja red de clientes, profesionales, proveedores, materiales, herramientas y detalles constructivos. La agilidad nos ayuda con marcos de trabajo colaborativo y herramientas digitales, modelando un proyecto con la información del saber entre todos, ayudados por la inteligencia colectiva para que, mediante diferentes sesiones de trabajo, diseñemos, definamos y proyectemos planos con memorias construibles. La gestión de proyecto ágil mediante Modelo Híbrido de Construcción consiste en aplicar marcos de trabajo ágiles en nuestros proyectos de construcción tradicionales como Scrumban. Empleamos disciplinas ágiles para las actividades con riesgo de deslizamiento, incertidumbre o complejidad y enfoque predictivo de procesos, para las actividades definidas o de flujo de trabajo previsible. Gestionamos la adaptación al cambio mediante Sprints de trabajo colaborativo, para monitorear la planificación, la revisión del producto entregable y retrospectiva de procesos seguidos. Trabajamos el desarrollo del proyecto, con los equipos directivos y productivos gracias a la comunicación y transparencia de los Sprint semanales. El factor humano todo lo condiciona, “personas por encima de procesos”. La complejidad está en la concatenación de actividades que se descomponen en tareas donde unos afectan a los otros por efecto dominó, llegando a ser más difícil la integración entre gremios y actividades que la propia ejecución de las tareas. Cuando se diseña podemos definir y conocer el “qué se hará” pero no exactamente el “cómo, cuándo ni con quién” porque necesitamos un Plan Maestro concreto y consensuado, que comprometa e involucre a todos los intervinientes. Con Scrum y Kanban, facilitamos el éxito del proyecto, reducimos riesgos, costos, aseguramos el alcance, plazo y calidad. La verdadera ingeniería de valor requiere de equipos multidisciplinares que mediante la diversidad de sus conocimientos y experiencias faciliten la entrega de valor, trabajando continuamente el refinado del producto y de los procesos productivos; eso es Kaizen, la mejora continua que facilita la Economía de Proyecto de valor financiero y social.